viernes, 13 de febrero de 2009

hombres topo




La otra vez soñé con vos

ya son muchas las veces que me pasa:

hay algo de todo esto que tiene que ser,

por necesidad, irreal.

Los hombres topo no soñamos

aprendemos a pensar despacio

a meditar

y así olvidamos.

Olvido merecido a tanto punzón,

tanta punta en hierro hendidor,

tanta severidad en el maltrato de mi sentir,

de mi sentir apagado como una noche adentro,

tanta noche nuestra haciéndose más oscura,

y más nuestra, y más oscureciendo y más.

... me di cuenta

estoy en este pozo

trepando por sus paredes tierra

rasgando raíces que fueron vida

que ahora invitan a que me una

en su canto de paz y descanso

no me esperen, porque me quedo

vecino de las que sostuvieron ramas

y ahora mueren olvidadas.

no me voy de hambre, ni me llevan

de sed, ni me cubren de sangre

me voy de pena



pero eso ya lo sabían

por eso me dejan

para que aprenda mi lección.

No hay comentarios:

Publicar un comentario